Nunca he tenido grandes pretensiones para este blog. Empezó como un "cuaderno de bitácoras" de quien que se enfrenta, sin nociones, al reto de decorar una casa. Pero lo que en principio era una necesidad fue desembocando en una pasión. Los muebles, diseñadores, espacios y colores comenzaron a invadir mi vida, generando en mí otras expectativas que no han terminado materializándose. No he sabido hacerme un hueco.
Mi vida ha cambiado mucho desde aquel lunes 21 de diciembre de 2009 en el que publiqué mi primera entrada. Por un momento, incluso, pareció desbaratarse y pensé que sería incapaz de encauzarla. Y durante este tiempo, el blog ha sido una vía de escape.
Os agradezco mucho a todos los que habéis dedicado un poco de vuestro tiempo a leer este espacio. Cada comentario e idea aportados me ha supuesto una gran alegría, sinceramente. Pero el blog requiere una dedicación que no encuentra recompensa, la mayor parte de las veces, y la ilusión se ha ido mermando.
No es un adiós, porque todavía quedan cosas pendientes en mi casa, pero sí un "ya nos veremos por ahí".