¡Estamos cogiendo carrerilla! Ayer, en una sola tarde, compramos dos aparadores Ikea PS (en blanco; la nota de color la daremos con la alfombra) y los estores Tupplur para oscurecer el salón. Sí, increíble. Hoy hemos ido a Leroy Merlin a por unas cosillas y el resto de la tarde descansaremos, no sea que nos herniemos con tanto esfuerzo.
El caso es que estamos planteándonos meternos con el dormitorio... Ya sé que a priori puede parecer sencillo, pero es que tengo un problema con la ubicación de la ventana: queda descentrada respecto de la cama.
1-. La idea original era, emulando un museo, colocar el mural del Beso de Klimt de Ikea sobre la ventana y en la pared escribir información sobre el pintor. Resulta que ya no venden los murales de los que os hablo... ¡Mecachis!
2-. Hemos pensado que podría quedar bien cubrir toda la pared de cortinas. En concreto, el modelo Sarita, de tela traslúcida. Pero, ¿de qué color? ¡Ay! Que conste que los complementos (funda nórdica y lámpara) no suponen un condicionante: sólo están ahí hasta que compremos algo. Además, ya os había adelantado en un post anterior, queríamos diferenciar la zona de ejercicio del resto del dormitorio pintándolo de otro color. Aunque quizá sea más sencillo cambiar la tonalidad...
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