Hace tiempo que quería hacer una entrada sobre la cocina y cotilleando Decoraestilo, me he encontrado una idea que me rondaba la cabeza: tener los utensilios de cocina a la vista.
La verdad es que hay cosas que no hay más remedio que dejar, por el incordio que supondría estar guardándolas después de cada uso, además de por el valor estético que puedan tener, pero soy de las que reducen esos elementos al mínimo: la cafetera, el servilletero (tipo bar en color negro), un frutero y un imán con los cuchillos, porque me parece la forma más cómoda de tenerlos organizados.
Cuando veo esas cocinas llenas de cacharros, botes y otros accesorios, no os negaré que me gusta (mi madre, por ejemplo, tiene un platero muy bonito), pero mantenerlo limpio es un sacrificio que no estoy dispuesta a hacer. Soy de las que piensan que cuantas menos cosas haya que levantar para pasar el trapo del polvo, mejor que mejor.
La verdad es que hay cosas que no hay más remedio que dejar, por el incordio que supondría estar guardándolas después de cada uso, además de por el valor estético que puedan tener, pero soy de las que reducen esos elementos al mínimo: la cafetera, el servilletero (tipo bar en color negro), un frutero y un imán con los cuchillos, porque me parece la forma más cómoda de tenerlos organizados.
Cuando veo esas cocinas llenas de cacharros, botes y otros accesorios, no os negaré que me gusta (mi madre, por ejemplo, tiene un platero muy bonito), pero mantenerlo limpio es un sacrificio que no estoy dispuesta a hacer. Soy de las que piensan que cuantas menos cosas haya que levantar para pasar el trapo del polvo, mejor que mejor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario